Dolor por el fallecimiento del empresario Hernán «Bubi» Perín

Impulsor y socio fundador de Laboratorios Natufarma, el farmacéutico y emprendedor incansable desarrolló su profesión atado a la pasión por descubrir las bondades de la naturaleza. Hernán Perín falleció este lunes a los 80 años de edad.

Profundo dolor y consternación causó en la comunidad esperancina la novedad del fallecimiento del farmacéutico Hernán Perín. «Bubi», como todos lo conocían, desde su farmacia siempre tuvo contacto directo con la comunidad y luego fue desarrollando su pasión con la transformación de productos medicinales de origen natural.

La investigación y el desarrollo en base a productos naturales lo tuvo siempre a Perín en el incansable trabajo de generar nuevos productos. Fue un precursor con sus largos viajes por el interior del país para difundir las propiedades naturales de sus productos.

El sueño de un laboratorio medicinal propio junto a Raúl Coraglia se fue transformando en realidad y como la historia de muchas empresas pymes de la región, comenzaron con pequeños desarrollos y hoy se constituyen en firmas líderes en el mercado.

Con el tiempo sus hijos tomaron la conducción de Laboratorios Natufarma, la empresa continuó en permanente crecimiento, pero «Bubi» no dejaba de participar de cada proceso y nuevos pasos. Sus consejos de conocimientos y experiencias estaban en cada desafío. No sin problemas, el sueño iniciado en una habitación junto a su farmacia se había transformado en una pujante empresa que hoy emplea a decenas de personas y es referencia en el país.

No dejó de lado sus pasiones naturales cuando encaró como hobbie el cultivo de verduras hidropónicas cuando nadie hablaba del tema o cuando encaraba el desarrollo de cultivos experimentales. Integrante del Club Esperancino Bochas, participaba de sus actividades con el entusiasmo que brinda la amistad, como la última plantación de ceibos que se realizó en el Parque de la Agricultura y de la cual tomamos las imágenes.

Hernán Perín falleció este lunes a los 80 años en nuestra ciudad y sus restos fueron inhumados ese día en horas de la tarde, en el Cementerio Municipal.

Sirva este espacio de reconocimiento a su incansable deseo de seguir para adelante, de abrir nuevos surcos y de sostener fuentes de trabajo como empresario de la ciudad. También como abrazo público de condolencias a todos sus familiares y seres queridos.